Ciedess señala que retiros de fondos de AFP se debieran permitir solo en "casos muy excepcionales", como "enfermedad terminal"

Continúan las reacciones por el fallo unánime dictado por la Corte de Apelaciones de Antofagasta, que ordena a AFP Cuprum la entrega de los fondos de ahorro a la profesora María Angélica Ojeda González.

Este viernes, el centro de estudios Ciedess declaró a través de un comunicado que el retiro anticipado de los fondos "sólo podría tener sentido en casos muy excepcionales, si y sólo si se verifica una condición de salud extrema, como el caso de una enfermedad terminal; y en la medida que no afecte a terceros sobrevivientes, tales como el o la cónyuge u otros dependientes".

La entidad ligada a la Cámara Chilena de la Construcción (a la vez relacionada con AFP Habitat), admitió que eventualmente y sólo en forma extraordinaria, "podría plantearse un ajuste extraordinario de parámetros aplicables a la modalidad de retiro programado, logrando con ello un retiro acelerado de los fondos".

En ese sentido, puso énfasis en que es importante tener presente que el monto de la pensión "está determinado por el saldo acumulado, la expectativa de vida de la persona y su grupo familiar; además de la tasa de interés".

El retiro programado es una modalidad de pensión que paga la AFP con cargo a la cuenta individual. Se calcula y actualiza cada año en función del saldo de la cuenta individual, la rentabilidad de los fondos, la expectativa de vida del afiliado y/o la de sus beneficiarios y la tasa vigente de cálculo de los retiros programados.

El monto de este tipo de pensión varía cada año, disminuyendo con el tiempo. En caso de que fallezca, con el saldo remanente se continuará pagando pensiones de sobrevivencia a sus beneficiarios y si éstos no existen, los fondos que eventualmente quedaren se pagarán como herencia.

Por último, el centro de estudios recalcó que el objetivo principal de los ahorros previsionales "es financiar las pensiones de los afiliados del sistema previsional, como una forma de sustituir los ingresos laborales cuando termina la etapa laboral activa; o bien, cuando no es posible generar ingresos por razones de salud, activando el seguro de invalidez y sobrevivencia en caso de ser beneficiario de este".